La Mujer Maravilla al ataque

No está fácil levantarse en las mañanas,

abrir los ojos y saber , otro día mas,

que no tengo manera de traerte de vuelta.

El cielo azul, el sol sobre el jardín

todo tan lindo y predecible

y esta pena sigue igual de grande y en el mismo lugar.

En un rato, cuando logre salir de la cama

me pondré mi disfraz de madre,

con mi capa invisible de Mujer Maravilla

revoleando el lazo de oro de aquí para allá,

inventando palabras para acallar el aullido que me habita,

repartiendo abrazos, retos y bromas

jugando a ser normal,

y en el fondo, en ese lugar que tal vez sea el alma,

mi niña rota, mi flor segada, tu silencio que es mi grito

tu ausencia definitiva, horrible y cierta.

Superheroína sin poderes al ataque,

a vencer al ogro mas tremendo,

sacando fuerzas de flaquezas

alquimista revolviendo el caldero del dolor

para fabricarme una alegría de a pedazos.