AUTORETRATO



Yo fui un testigo inquieto
aprendí las leyes y las destruí con fuego.
Armé otros códigos,
le puse flores a mis miedos
y cultivé con amor mis sueños.
Encendí velas, abrí ventanas
caminé noctámbula y agradecida de estar viva
por desiertos sombríos, bajo la luna.
Equivoqué palabras y razones
pero nunca me importó
deshice autoridades, deserté de muchos sitios
anduve en rumbos ciertos o perdida
y siempre, como un milagro,
regresé intacta hasta mí misma.
Conocí el amor, jugué sus juegos,
escribí algunos versos,
quise tener un poco de todo
y no sé si encontré lo que buscaba,
pero sigo en pie y todavía camino.
-->

Comentarios

Publicar un comentario

Entradas populares